Te esperaré en
silencio
sin lamentos, ni
reproches
sólo la noche será
testigo
de mi alma desnuda
de cobijarme en la
nada
y contemplar hasta el
alba
ver aparecer una
silueta
dibujada al horizonte.
He llorado tu ausencia
calvario de noches de
desvelo
pesadillas que me
despiertan
maldita ella
quiere arrebatarme tu
esencia
que dejaste impregnada
en cada poro de mi
piel
en cada pliegue de
unas sabanas.
Te esperaré en
silencio
tres amaneceres
treinta primaveras
trescientas puestas de
sol
y toda una vida
entera.
Jandra
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